Para pelear con la ansiedad…nada mejor que cocinar!
La dulce espera sigue y las ideas revolotean por la cabecita, a falta de sueño.
Ésta vez quise combinar dos sabores que me encantan: el del chocolate blanco y el del toffee, ambos muy suaves, por lo que el resultado no es una explosión de sabor, pero sí un cupcake húmedo, esponjoso y muy agradable al paladar. El toquecito ácido de la mandarina es inesperado y combina muy bien.
Así que, a probar gente! Y cuenten cómo les queda!
Rinde: 18 cupcakes
Ingredientes:
- 165 gramos de harina
- 165 gramos de manteca sin sal a temperatura ambiente
- 165 gramos de azúcar
- un chorrito de esencia de vainilla
- 50 ml. de leche a temperatura ambiente
- 1 cdta. de polvo de hornear
- 3 huevos medianos a temperatura ambiente
- ralladura de cuarta mandarina
- Pirotines
- Bandeja para cupcakes
Ganache de chocolate blanco:
- 160 gramos de chocolate blanco en tableta
- 160 ml. de crema de leche
Salsa de toffee:
- 1 taza de crema de leche
- 1/2 taza de azúcar (blanca o rubia)
- 1 cda. de manteca sin sal
Hilos de caramelo:
- 1/2 taza de azúcar
- agua
- Papel de aluminio
Buttercream:
- 225 gramos de manteca sin sal a temperatura ambiente
- 225 gramos de azúcar impalpable
- 50 ml. de leche a temperatura ambiente
Preparación:
- Precalentar el horno a 180°C
- Batir a velocidad media la manteca (a temperatura ambiente) y agregar poco a poco el azúcar, hasta obtener una mezcla cremosa.
- En bol aparte, batir los huevos para integrarlos bien.
- Agregar los huevos a la mezcla de manteca y azúcar sin dejar de batir.
- Añadir la harina y el polvo de hornear, tamizados; luego la vainilla y la ralladura de mandarina, sin dejar de batir.
- Finalmente agregamos la leche y seguimos batiendo hasta que veamos todo muy bien integrado.
- Llenamos los pirotines, previamente colocados en la bandeja para cupcakes, a 3/4 de su capacidad.
- Horneamos unos 15-20 minutos, o hasta que al pinchar con un palillo, éste salga seco.
- Al retirar del horno, dejar enfriar antes de decorar.
Ganache de chocolate blanco:
- Trocear la tableta de chocolate y colocar los pedacitos en un bol de vidrio o aluminio.
- Agregar la crema.
- Colocar el bol en una cacerolita con agua y llevar a fuego medio (osea, a baño María).
- Mientras el chocolate se derrite, no dejamos de mezclar, usando una cuchara de madera, para que no queden trozos en la ganache. Tampoco dejamos que la mezcla hierva, y cuando el chocolate se haya derretido totalmente, retiramos del fuego.
Salsa de toffee:
- Colocamos el azúcar y la manteca en una cacerolita y calentamos hasta que empiecen a fundirse.
- Cuando la mezcla empieza a burbujear, revolvemos para que el caramelo se deslice bien y evitar así restos de azúcar sueltos.
- Cuando logramos una mezcla homogénea, agregamos la crema, sin dejar de remover.
- Si tenemos azúcar apelotonada en la cuchara, la raspamos con otra cuchara y dejamos que esos pedacitos que se acaban de agregar a la mezcla se derritan.
- Seguimos removiendo mientras la mezcla hierve.
- Cuando toma un color amarillo brillante y vemos que está un punto más líquida de lo que la necesitamos, la retiramos del fuego. Al enfriar, se espesará.
Hilos de caramelo:
- Colocamos el azúcar en una sartén o cacerolita, con un chorrito de agua y llevamos a fuego medio.
- Removemos constantemente mientras el azúcar se derrite. Si es necesario le agregamos otro chorrito de agua.
- Cuando el caramelo toma un color ámbar claro, está pronto. Retiramos, y seguimos removiendo un ratito porque el caramelo se sigue haciendo aunque no reciba calor. Si lo dejamos en el fuego, quedará amargo.
- Colocamos un trozo de papel aluminio en la mesada.
- Tomamos caramelo con una cuchara y volcamos sobre el aluminio, formando hilos finitos.
- Dejamos enfriar.
Buttercream:
- Batimos muy bien la manteca.
- Agregamos el azúcar impalpable tamizada, sin dejar de batir.
- Por último añadimos la leche, batiendo hasta integrar.
Armado:
- Separamos un poco de ganache de chocolate blanco.
- Mezclamos en un bol la ganache de chocolate blanco restante con la salsa de toffee.
- Con un cuchillo de sierra, cortamos el centro del cupcake y lo retiramos.
- Con una cucharita, vertemos la mezcla anterior en el centro del cupcake.
- Volvemos a colocar la tapita de cupcake que habíamos removido, para que quede cubierto.
- Cubrimos la superficie del cupcake con la ganache que habíamos separado. Luego notaremos lo húmeda que queda la masa.
- Despegamos con cuidado los hilos de caramelo del papel de aluminio.
- Cargamos una manga de repostería con la buttercream y decoramos los cupcakes. Luego, colocamos pedacitos de caramelo sobre ellos.
- Listos para la foto!!! 🙂